De sueño en sueño.

Es imposible no hacerse una idea de como se desarrollaran ciertos eventos en nuestras vidas, siempre esperamos lo mejor de nosotros mismos, porque o si no seriamos una manada de pesimistas y no tendría sentido seguir viviendo o adelantarse a los hechos, el problema de esto es que luego viene la desilusión, podemos lidiar con eso, pero aún así sigue siendo duro no haber logrado lo que estaba guardado en nuestra imaginación.

Cuando estaba el colegio, me imaginaba que al graduarme todo iba a ser diferente, viviría fuera de mi ciudad de origen, me iría perfectamente en la universidad, tendría un promedio perfecto, me graduaría a cierta edad especifica y así muchas cosas más sobre la familia, los amigos y ese tipo de cosas.

Ahora que ya me he graduado y los años me han pasado por encima me doy cuenta de lo inocente que era en ese entonces, pero no lo digo a mal, porque de las expectativas es que vivimos, que de cierta forma son nuestros sueños a pequeña escala, pero sin ellos no nos motivaríamos a seguir adelante, se supone que la vida no es sencilla, hay que pasar por un sin numero de situaciones que nos ayudaran a crecer, a aferrarnos a nuestros sueños, aprenderemos lo que tengamos que aprender y seguiremos nuestro camino, porque tarde o temprano hay que llegar a la meta, personalmente no sé como la gente vive por allí sin ánimos y sin propósitos, es cierto que a uno se les hace más difícil que a otros, sin embargo eso no debería ser una excusa para quedarse sin hacer nada.

Por más pequeño que sea tu propósito debes siempre luchar por llevarlo a cabo sin importar lo duro del camino, la gente dice que después veremos la recompensa y yo quiero creer en eso, no sabría decirles cuando obtendré mi recompensa, pero por el simple hecho de levantarme a diario y dar un poco de mi para seguir adelante me sirve para llegar a una de mis tantas metas personales, y aunque a lo mejor ya no me voy a graduar a esa edad especifica, ni mucho menos con el promedio perfecto y eso me cree algo de desilusión al final eso no tendrá mucha importancia comparado con todas esas cosas que fui construyendo en el camino.

La idea principal, lo que realmente quiero decir en todo este mar de palabras, es que no importa lo que suceda, debemos aferrarnos a eso que alguna vez nos dijimos y recordar una y otra vez lo que queremos llegar a ser, todo se trata de ser perseverantes y no rendirnos, es cuestión de mantener nuestra palabra.